La filosofía de compartir, ¿por qué es mejor que poseer?
La Navidad es una época en la que compartir cobra un sentido especial
Compartir se ha convertido en un fenómeno global. La población comparte todo tipo de productos desde automóviles a herramientas, libros, viviendas, bicicletas o ropa. La economía colaborativa está en pleno auge. Según un estudio de PwC, las ventas globales de la economía colaborativa alcanzarán los 335 mil millones de dólares en 2025.
Las nuevas tecnologías como Internet o las aplicaciones de servicios compartidos hacen que compartir sea realmente fácil, ya que se puede acceder a una infinidad de servicios a través de dispositivos móviles. Los vehículos eléctricos compartidos son un ejemplo de ello. car2go, la compañía líder de flotas flexibles de carsharing y para muchos un símbolo de economía colaborativa, cuenta en Madrid con más de 187.000 miembros que utilizan la flota de 500 coches eléctricos una media de 12-15 veces al día.
El hecho de compartir un vehículo sustituye hasta 8 vehículos privados en las calles, libera espacio de aparcamiento y ahorra emisiones contaminantes. “Compartir es mucho más eficiente, accesible y ya forma parte de la cultura de la gente. A las personas les encanta compartir y lo viven como una experiencia” afirma Orazio Corva, responsable de car2go en Madrid.
Compartir proporciona libertad individual, es eficiente, permite ahorrar dinero y genera ventajas tanto para el medioambiente como para la sociedad. En España, con cada vez más adeptos a compartir, la economía colaborativa ha llegado para quedarse.
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