Optimizar la potencia contratada y adecuar la tarifa de acceso a la red pueden ayudar a ahorrar en la factura eléctrica

Los repetidos cambios en el sistema eléctrico han conseguido que los consumidores no conozcan los detalles de las tarifas que tienen contratadas. Según la OCU, un 25% de los consumidores reconoce que no sabe si tiene contratado el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) o por el contrario está en el mercado libre. En este contexto, APIEM participó, el pasado miércoles 22 de marzo, en una jornada informativa organizada conjuntamente por la asociación de vecinos del barrio centro de Leganés y el Ayuntamiento de la localidad en el objetivo de ofrecer una serie de consejos para ahorrar y reducir la factura eléctrica.

* Isabel García Marín, Técnico de Sostenibilidad del Ayuntamiento de Leganés y Elena Ruiz, Directora Técnica de APIEM

"Obtener información de la compañía comercializadora acerca de cuál es la potencia contratada o la tarifa de acceso a la red son condiciones necesarias si queremos disminuir el importe de nuestra factura", afirmó Elena Ruiz, directora técnica de APIEM, en el transcurso de la jornada, quien comentó que una gran parte de lo que pagamos tiene que ver con la potencia que tenemos contratada y que a la mayor parte de los hogares les bastaría con una potencia de entre 3,3 y 4,4 kW.
"Sólo se puede realizar un cambio de potencia al año pero el ahorro podría suponer alrededor de unos 60 euros al año por cada kW que se recorte, con lo que estaríamos economizando ya de manera significativa", argumentó.
Otro capítulo interesante tiene que ver con la tarifa de discriminación horaria, aquella en la que se paga diferente precio por el kWh dependiendo del momento del día que se consuma. El consumo puede resultar más barato realizarlo en determinadas horas, a cambio de pagar algo más el resto del día.
El objetivo es realizar el mínimo consumo posible en los horarios de mayor demanda energética. Pero muchos usuarios temen contratarla porque no es posible elegir siempre a qué hora se consume electricidad. "El peaje de acceso a la red (ATR) indica el tipo de contrato y el tipo de suministro de cada usuario", siendo en viviendas habituales la nomenclatura 2.0A, la más habitual. "Normalmente las horas de energía más baratas son las nocturnas, por lo que, para conseguir el mayor ahorro en la factura, habría que poner la lavadora y la cocinar por la noche", comentó a los asistentes.

* Datos incluidos en una factura real que indican la potencia contratada y la tarifa de acceso a la red.

¿Cuáles son los horarios Valle y Punta de la tarifa de discriminación horaria?
El horario Valle de 14 horas abarca de 22 a 12 h en invierno y de 23 a 13 h en verano.
El horario Punta de 10 horas abarca de 12 a 22 h en invierno y de 13 a 23 h en verano.
Otro detalle que vemos en la factura de la luz tiene que ver con el alquiler de los equipos de medida o contadores. Por ley es obligatorio disponer de un contador de consumo de electricidad, así que podemos tenerlo en alquiler con la empresa distribuidora (facturado a través de la comercializadora), o comprarlo en propiedad.

"Este coste sin embargo es muy pequeño dentro de nuestra factura, ya que está regulado por el Ministerio de Industria y actualmente es de 0,57 euros al mes para un contador analógico y 0,81 euros para uno telegestionable", subrayó.
Junto a estos conceptos, otros como el de la energía reactiva y el bono social también fueron explicados en el contexto de la jornada, que contó con una veintena de asistentes.

Para finalizar y tras un debate abierto con numerosas preguntas de los presentes se dio por concluido el acto con una interesante reflexión: "Una vez hayamos optimizado la potencia contratada a las necesidades reales de suministro y optado por una tarifa adecuada lo mejor que podemos hacer para disminuir la factura tiene que ver con adquirir unos hábitos de consumo energético racionales: mejorar el aislamiento de las ventanas, hacer un uso eficiente de la calefacción, utilizar alumbrado de bajo consumo, desactivar la función de standby de la TV, comprar electrodomésticos con etiquetado energético clase A, etc., y sobre todo, desconectar aquellos aparatos eléctricos que no estamos utilizando".